El Festival Internacional de Música de Cine de Tenerife (Fimucité) ha celebrado este año su edición número 16 en torno a la temática Cyberpunk, con un programa cargado de actividades de lo más diversas que tenían previsto desarrollarse desde el 16 hasta el 25 de septiembre: conciertos especiales, masterclass en la Film Scoring Academy, proyecciones de cine de verano o diversos premios como Fimucinema y los V Premios de la Música del Audiovisual Español de MUSIMAGEN. Pero sin duda los puntos fuertes eran los dos esperados conciertos del fin de semana, Cyberpunk Remastered I: Manga / Anime el viernes 23 y Cyberpunk Remastered II: El Alma de la Máquina el sábado 24.
Lo que no podíamos saber era que entre los invitados a Fimucité iba a colarse Hermine, un ciclón tropical que llegó en forma de huracán para arrebatarnos los dos últimos días de un festival que con tanto trabajo y esfuerzo se había estado gestando desde hacía casi un año y que por fin volvía a su pleno esplendor tras la pandemia del COVID-19. El concierto del sábado, Cyberpunk Remastered II, fue cancelado debido a la alerta máxima declarada por la Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias, a pesar de que contaba con más entradas vendidas que el del viernes. Asimismo, se aplazaron al domingo 1 de octubre el concierto Recuerdos de la gran pantalla (interpretado por la Joven Orquesta Fimucité) y la entrega del Premio Honorífico Antón García Abril a Wendy Carlos (responsable de bandas sonoras como Tron o La naranja mecánica). El Palmarés de los premios Fimucinema, que estaba previsto se anunciara en el concierto Recuerdos de la gran pantalla del domingo 25 de septiembre, finalmente se ha aplazado para el martes 4 de octubre, de modo que tendremos que esperar para saber quién se llevará el premio en la categoría de música para videojuegos, que se estrena en esta edición como ya os contábamos hace unos meses en Metodologic.
No obstante, si precisamente algo nos ha enseñado la pandemia es a valorar lo que tenemos y, en este caso, a nosotros nos gustaría centrarnos en lo que el huracán no se llevó, porque aunque no pudimos vivirlo todo, todo lo vivido en los días que pudimos cubrir el evento desde Metodologic ha superado con creces nuestras expectativas. Y es que el concierto del viernes en el Auditorio de Tenerife fue legendario.
En líneas generales, el concierto tenía como aliados principales un auditorio con una acústica impresionante, una plantel de más de cien músicos en escena y una realización y escenografía e iluminación a la altura de un espectáculo de tamaña envergadura. Ya antes de comenzar se fueron proyectando videos promocionales de los patrocinadores y colaboradores del festival, el tráiler del mismo y videos de promoción turística de Tenerife, lo cual da una visión general del apoyo institucional del festival en todos los niveles. Durante todo el concierto se pudo comprobar la acertada realización en directo que, combinada con imágenes de las películas cuyas bandas sonoras iban sonando, nos mostraba imágenes en vivo de la orquesta, el director o los intérpretes invitados, que no fueron pocos como veremos más adelante.
La ejecución de la Orquesta Sinfónica de Tenerife, el Tenerife Film Choir y el Coro Polifónico de la Universidad de La Laguna fue impecable y, cómo no, la dirección enérgica y apasionada del maestro Diego Navarro, alma mater del festival, consiguieron trasladarnos a un universo Cyberpunk en el que quedamos mágicamente atrapados durante más de dos horas de música.
El concierto comenzó con la entrega de los V Premios de la Música del Audiovisual Español de MUSIMAGEN, que fueron entregados por Enrique Arriaga (Vicepresidente 1º del Cabildo de Tenerife) y en el que destacamos por la parte que nos toca el premio de Gerard Pastor por su trabajo Discovery O Park, The Turtle Game, en la categoría Mejor música original para videojuegos. Para abrir boca, pudimos escuchar una preciosa suite con la música de todos los galardonados, con arreglos de Gonzalo García Santos.
Y el Fimucité de 16 años se vio atraído cual adolescente por el mundo cyberpunk, como señalaron los presentadores del concierto, y entramos de lleno en la música de Alita: Ángel de combate (compuesta por Tom Holkenborg), en concreto con el tema Motorball (arreglos de Thomas Bryla). Ya en este primer tema pudimos contar con la presencia de Juno Reactor en los sintetizadores, Greg Ellis en la batería y Amir John Haddar El Amir en la guitarra eléctrica, lo que acompañado de la orquesta y el coro perfectamente sincronizados elevaron las expectativas desde el primer acorde.
Siguió el tema Kaneda de la película Akira, también con arreglos de Thomas Bryla, donde quizá el coro masculino no brilló tanto como en el resto del concierto y donde la potente percusión tomó absoluto protagonismo para trasladarnos a la tradición musical japonesa. Una tradición que siguió, y de qué manera, con los temas compuestos por Kenji Kawai para Ghost In The Shell, con el tema de los créditos de la primera película, Making of Cyborg y con una maravillosa suite de Ghost In The Shell: Innocence. En especial, reseñar que el coro femenino sobrecogió con su interpretación de unas piezas muy complejas para voces con una tesitura “no japonesa”, sobre todo en el primer tema. Este primer bloque de música de anime arrancó la primera gran ovación de la noche por parte del público.
Tras un breve descanso, y antes de empezar la segunda parte, se aprovechó para entregar el Premio Antón García Abril al ingeniero de grabación y productor Dennis Sands, también de la mano de Enrique Arriaga. Con una trayectoria de más de 40 años y cuatro nominaciones a los Premios de la Academia (Polar Express, Náufrago, Contact, Forrest Gump), ha ganado un Premio Grammy (BSO de American Beauty) y un Premio Emmy (Steve and Eydie Salute Irving Berlin), y también el Premio Cinema Audio Society Career Achievement Award, por toda su carrera. Al recoger el premio, recordó una cita de Mark Twain en la que afirmó que los dos momentos más importantes de la vida de una persona son cuando nace y cuando sabe para qué ha nacido, pues con humildad reconoció que el momento en el que escuchó una orquesta y empezó a trabajar en la música, escuchó la llamada y supo cuál era su propósito en la vida, por supuesto compartiéndolo con su familia.
Para celebrar el 40 aniversario de Blade Runner y también como homenaje a Vangelis, fallecido en mayo de este año, la segunda parte del concierto arrancó con una extensa suite de unos diez minutos con arreglos de Thommy Andersson que recogía los temas principales de esta película de culto, con breves locuciones reproducidas de la película durante toda la composición, interpretadas por el presentador del concierto. Para el fragmento del tema de amor (Love Theme) se contó con la colaboración del saxofonista Kike Perdomo.
Y nos adentramos en otra galaxia de la mano de la partitura de Jerry Goldsmith para Desafío Total, en concreto con el estreno mundial del tema The Hollowgram, con un sonido más clásico y sinfónico que el resto de piezas del concierto, al más puro estilo Goldsmith, pero no por ello menos potente ni exigente a nivel orquestal.
Las composiciones de Johnny Klimek para El Atlas de las Nubes y Matrix Resurrections (arreglos de Gene Pritsker) tomaron el relevo cada una con una personalidad muy diferente. La primera más melódica y con un coro envolvente que nos trasladó a las nubes para hacernos luego descender a la realidad (o ciber-realidad) de la segunda. Se comentó en la presentación que precisamente en la primera entrega de Fimucité se interpretó ya la música de la saga Matrix por parte de su primer compositor, Don Davis, y que en la segunda edición, Johnny Klimek fue invitado como artífice de la música para la película de El Perfume, de modo que en esta edición se cerraba el círculo uniendo a Matrix, Klimek y, cómo no, a Juno Reactor.
Y en un concierto como este, uno de los platos fuertes fue precisamente la faraónica suite de la banda sonora compuesta por Marcin Przybylowicz y P.T. Adamczyk para Cyberpunk 2077, la más esperada sobre todo para los amantes de la música de videojuegos. Un estreno mundial que supuso uno de los momentos álgidos de la noche y que supo combinar a la perfección los efectos sonoros y sintetizadores con la potencia de las guitarras eléctricas (esta vez también con el propio P.T. Adamczyk dándolo todo en el escenario) y una orquesta sinfónica que convivieron sin pisarse ni saturarse. Una composición apabullante y “cañera” que elevó el sonido cyberpunk a categoría de ópera rock gótica y cuantos calificativos podamos incluir en sus más de doce minutos de duración. Eso sí, no faltaron momentos más melódicos y orquestales ni tampoco la canción prinicipal del videojuego, Never Fade Away, interpretada por la cantante original, Olga Jankowska. Quienes iban desconfiados en lo que podrían escuchar en un tipo de concierto de esta temática y con una banda sonora de videojuegos seguro se llevaron una grata sorpresa al comprobar la calidad artística de esta suite. La gran ovación del público así lo demostró al menos.
Y sin bajar el listón, continuamos con el tema Mona Lisa Overdrive, compuesta por Don Davis y Juno Reactor para la película Matrix Reloaded (arreglos de Thomas Bryla). Sin duda, uno de los temas más complejos, exigentes y contundentes de la noche, que tampoco decepcionó en su magistral y trepidante interpretación de músicos solistas, orquesta y coro, ni en la vigorosa dirección de Diego Navarro que no decayó en los diez minutos de la pieza, ya acumulados a la hora y media de concierto que llevaba a sus espaldas, y a la que los asistentes respondieron con una tanda de aplausos y vítores casi de igual duración.
Pero aún quedaban más momentos únicos por vivir. Por segunda vez, Diego Navarro se dirigió a la audiencia para presentar a uno de los invitados especiales y ya conocido en Fimucité, Vince DiCola, que se unió a la orquesta y al coro, tocando él mismo los sintetizadores para interpretar el estreno de la suite de Transformers: La película (arreglos de Leigh Phillips). Un glorioso y apoteósico viaje a los 80 con esta suite que nos puso a todos los pelos de punta y nos contagió a todos de una energía vibrante y positiva. Destacar una vez más la perfecta sincronía de orquesta, músicos solistas, coro y el cantante Jadel, sobre todo en el tema Dare, que interpretara en su día Stan Bush.
Y qué mejor para terminar que Terminator, con la presencia al piano en el escenario de otro de los invitados estrella de esta edición del festival: su compositor Brad Fiedel. Eso sí, pudimos verle tocar gracias a la proyección en directo ya que era complicado distinguirle entre la cantidad de músicos que ocupaban el escenario. La épica suite de Terminator y Terminator 2: El juicio final, con arreglos también de Leigh Phillips, nos sumergió en el mundo cibernético de la saga y los acordes contundentes y frenéticos por todos bien conocidos nos aceleraron el corazón, no solo por la emoción de poder disfrutar en directo esta mítica banda sonora sino por la tristeza de que el concierto fuera llegando a su fin.
Sin embargo, antes de la emotiva despedida por parte de los presentadores y sobre todo de Diego Navarro, al suponer este concierto el final adelantado e inesperado del festival, nos sorprendieron con dos bises: el primero de nuevo Blade Runner de Vangelis, esta vez con el tema de los créditos finales. El segundo, uno de los temas que tendrían que haberse interpretado en el concierto cancelado del sábado, el de Pacific Rim (Ramin Djawadi), donde volvimos a vibrar con la potencia de la orquesta y, en especial, del aclamado guitarrista El Amir, que imprimió un estilo más rockero para acabar por todo lo alto el concierto.
Con todos los compositores, músicos y presentadores despidiéndose en el escenario y visiblemente emocionados, el público del auditorio quiso recompensarles ese titánico esfuerzo, junto a todo el equipo de Fimucité, con una extensa ovación para compensar esas lágrimas en la lluvia por no poder continuar con lo que quedaba de festival.
Pero Metodologic siguió aún al pie del cañón contra viento y huracanes. El sábado, si bien la tormenta trastocó todos los planes y los compositores se encontraban más dispersos e ilocalizables, gracias al maravilloso equipo de prensa y comunicación del festival (Vanesa Bocanegra y Carlos Palencia, a los que no podemos más que agradecer su atención, dedicación y compromiso) tuvimos la suerte de poder charlar con los compositores Vince DiCola, Brad Fiedel y Johnny Klimek, entrevistas de las que os daremos cuenta en un artículo especial de Gaby López.
Sin duda, en nuestra mente aún siguen resonando los ecos de toda la música que habíamos podido disfrutar en esa noche única y especial del concierto del viernes, aunque con el sabor agridulce de saber que sería la última. Atrás quedaban otras actividades como la masterclass de la Film Scoring Academy sobre La superproducción musical en videojuegos de gran presupuesto (el lunes 19 de septiembre con Marcin Przybylowicz, P.T. Adamczyk y Olga Jankowska) o la masterclass y concierto sobre Composición para animación y videojuegos desde el soporte electrónico a cargo de Vince DiCola el miércoles 21 y jueves 22, pero dirigidos a un público más reducido y especializado (escolares y/o profesionales del sector).
En este sentido, quizá el festival adolezca un poco de falta de contacto con los fans al igual que sucede en eventos como el festival MOSMA (Movie Score Málaga), donde los encuentros con autores son más abiertos y es más fácil acercarse a los compositores e incluso que haya firma de discos. Sin embargo, Fimucité está pensado a su vez como un acontecimiento más amplio, con una semana cargada de eventos gratuitos que llenan Tenerife de música y cine para todos los gustos. Cada festival imprime su sello personal y la veteranía de Fimucité demuestra que, a pesar de todo, el amor por la música supera todas las barreras.
En definitiva, Fimucité 16 no se ha perdido “como lágrimas en la lluvia” sino que lo experimentado estos días quedará en nuestra memoria como ese rayo de luz que anuncia el fin de una tormenta. Porque eso es para nosotros la música de cine, televisión y videojuegos: el alma de la máquina.