Cuando me puse a los mandos de este nuevo título de estrategia por turnos de suelo cuadriculado no tenía ni idea de que detrás de ese “tactics” había un gran juego clásico de rol, de los de papel y lápiz, con una legión de seguidores del libro basado en el mundo de H.P Lovecraft. Modiphius Entertainment, la editora de estos juegos, todavía mantiene con vida esta franquicia; y al igual que sucede con el universo Warhammer, Achtung! Cthulhu Tactic también tiene una buena colección de expansiones y miniaturas de plomo. Fallout, Vampire o Star Trek son otros nombres ya conocidos por nosotros que completan el catálogo de dicha compañía, además de una publicación digital donde podemos encontrar todas las novedades de todo su catálogo de juegos.
Auroch Digital se encarga de traernos este Achtung! Cthulhu Tactics, gracias a las aportaciones de los fans que les hicieron llegar por medio de Kickstarter. La compañía retoma todo lo que se puede encontrar en las bases del juego de rol original, pero bajo las mecánicas típicas de un juego de estrategia por turnos sobre cuadrículas, del estilo XCOM, Hard West y similares. Con una premisa que se me planteaba muy atractiva, mezclar la estrategia por turnos, los nazis y el mundo creado por el siempre genial Lovecraft, me hizo tirarme de cabeza a por la propuesta de Auroch Digital, y no tardé en sumergirme en los mapas y laberintos del juego. La historia está llena de nombres y guiños reales, como el de Sol Negro, una de las facciones nazis del juego, que toma la referencia del Schwarze Sonne, el símbolo del misticismo nazi. Todos sabemos que tanto Adolf Hitler como uno de sus más importantes oficiales, Heinrich Himmler, eran grandes ocultistas y seguidores del esoterismo más oscuro. Esa mezcla de lo real y la fantasía de los cuentos de Lovecraft me ha cautivado.
Desde el inicio, nos ponen en situación con unos textos e imágenes reales de la segunda guerra mundial, contándonos que dos facciones nazis, el Sol Negro y los Natchwolfe, tienen acorralados a un grupo de soldados aliados en un bosque lleno de misterios, monstruos y magia. Los aliados envían a dos especialistas, expertos en artes esotéricas que no tardan en encontrarse con dos supervivientes del combate, que acaban uniéndose a nuestro grupo. A partir de aquí, y donde acaba el tutorial, nos llegan órdenes de acabar e investigar los planes de las facciones en ese bosque. Después de jugar otros títulos parecidos, como Shadow Tactics, encuentro un poco deslucida la manera en la que la trama nos presenta a los cuatro personajes, y muy brusca la explicación de las nuevas mecánicas que aporta este juego. Quizás esta sensación sea por el tutorial, demasiado sobrecargado en tan poco tiempo, ya que en nuestra segunda misión no tardan en dejarte solo ante los peligros de ese bosque maldito.
Nuevas opciones de ataque, de movimiento y de orientación se me hacen un poco complejas cuando, después de darles varias vueltas a las mecánicas generales del juego, te das cuenta que no aportan mucho a los factores lúdicos de la historia. Esto mismo sucede con otra nueva implementación, que son los índices de estrés de nuestros personajes. Esto me resultaba muy atractivo, sobre todo cuando has jugado a los juegos de rol clásicos basados en los mitos del Cthulhu de H.P Lovecraft. Uno de los toques que mejor recordaba eran las denominadas tiradas de corduras; siempre que te enfrentabas a situaciones de tensión o habías estado delante de una criatura llegada del submundo, nuestro personaje se sometía a un estrés brutal que incluso podía hacerle perder la cabeza. Para resolver eso, tenías que hacer una tirada de dados adicional y así averiguar si tu héroe había salido ileso mentalmente o no… en caso negativo, el master nos informaba que, debido al estrés, habías perdido la cordura, y seguidamente empezabas a hacer cosas ilógicas, como disparar a tus propios compañeros de grupo.
Pues esto ocurre de la misma manera en Achtung! Cthulu Tactics: si el indicador de estrés llega a unos límites muy bajos, puedes perder el control de los actos de tu personaje, llegando a disparar a tus compañeros o incluso a moverse de manera incoherente. El problema viene cuando llevas unas cuantas horas jugadas a esta aventura y te das cuenta que en ningún momento has prestado atención a este factor,ya que al final de cada combate se resetea y volvemos a tenerlo como al principio, así que nunca te preocupas de que tu personaje vaya a perder la cabeza. Una idea que se queda en eso, una buena idea pero mal implementada, una lástima. Y todo esto es un ejemplo de la sensación general al jugar a este Tactics, una idea de lo más atractiva pero que se queda a medio camino de lo que hemos visto en otros títulos de este género. Por otra parte, la subida de niveles y habilidades especiales de cada personaje transforma a tu pelotón en una auténtica máquina de aplastar enemigos, el terror de los bosques de las Ardenas. Después de unas cuatro o cinco horas jugando, el reto desaparece, tan solo te dedicas a machacar enemigos sin ningún interés. El único atractivo que te queda es cómo utilizar las estrategias de combate, que ese apartado resulta ser de lo mejor de esta aventura, la profundidad de los combates, situando a tus compañeros atentos a cualquier movimiento enemigo que pase por la zona que visibiliza, cubriéndonos aunque no sea este nuestro turno y muchas otras opciones que se te muestran una vez controlas el funcionamiento de todo tu armamento y movilidad por el campo de batalla.
El diseño gráfico, aún estando muy logrado, carece de una mayor gama de escenarios. Los bosques y matorrales llegan a cansar, al igual que el diseño y variedad de nuestros enemigos, que también se quedan un poco cortos. La inmersión en las misiones o submisiones está potenciada por la estupenda banda sonora, que crea tensión en el momento justo o cambia hacia momentos más terroríficos con toques de absoluta preciosidad. En definitiva, Achtung! Cthulhu Tactics no es un mal título. Pese a que me he puesto muy exigente debido a que me esperaba mucho más de este juego y me considero gran seguidor de este género, me sabe mal que una idea tan buena como ésta salga un poco capada, quizás por la falta de inyección de dinero. Tiene grandes apuestas, la profundidad de la estrategia de los combates, los nuevos indicadores de estrés, el equilibrio de armamento y habilidades de nuestro equipo, la idea de mezclar el mundo Lovecraftiano con la amenaza nazi… ingredientes que. cuando se presentan la primera hora de juego, te lleven a creer que estás delante de un bombazo, lástima que no tardes en ver cómo se desinfla el globo delante de tus manos.
Aclarar que no es un mal juego, ni mucho menos; pero existiendo apuestas en el mercado como Hard West, XCOM o Shadow Tactics, es mi deber exigir a un juego de este calibre algo más.